ALCATRAZ

Parece que fue mucho el tiempo transcurrido y hoy cuando al fin llego la hora de partir, creo que la tortura no fue tan larga como intensa, sin embargo, paso mucha agua bajo el puente, muchas historias cargadas de pesimismo, ha sido un resumen de malos ratos y sufrimiento, que se descomprimió en un abrir y cerrar de ojos al llegar.

Como bien me dijo una amiga, ¡¡¡estas en alcatraz!!! no hay a donde arrancar, no hay como ocultarse, siempre estas vigilado como en una cárcel, en una isla sin rejas y con muchos vigilantes, un lugar donde la delación se practica gratuitamente, donde todos esperan ver cuando caerás, sin importar quien eres, por el solo placer ver sufrir al otro.

Añoro volver al anonimato, hacer una gota mas en el mar, una hoja mas del árbol.

Quiero reconstruir mi alma y recobrar la libertad que tanto añoro, aunque no la ocupe , requiero mi espacio vital.

Añoro mis excesos sin publicidad, mi libertinaje e inmoralidad.

Esta virtud estéril que no conduce mas que a la opresión de mis instintos.

En este lugar se detuvo el tiempo y se congelo el debate.

Se conversa mirándose el ombligo y no se avanza, solo se pisan la cola.

Mucha gente buena contagiada de envidias nimias, una lógica demencial, les falta todo y no hacen nada, lo poco que tienen lo destruyen.

En su mayoría vociferan como perros rabiosos y se saludan de abrazos cargados de risas y odios.

Tanto añoraba estar aquí, como el deseo que hoy me impulsa a no volver jamás.